Además del nopal, México tiene una gran variedad de cactus,
algunos de ellos con formas y características sorprendentes.
México es reconocido por su gran diversidad de flora y
fauna, que no deja de asombrar tanto a sus habitantes, como a la comunidad
internacional. Sin embargo, en el imaginario colectivo, los cactus juegan un
papel protagónico. Aunque el nopal es el más conocido de ellos, existen
numerosas especies de cactus, todas ellas con cualidades y formas
impresionantes.
Los cactus o cactáceas son originarios del continente
americano y se piensa que evolucionaron a su forma actual hace 30 o 40 millones
de años, tras la separación de la Pangea. Se calcula que existen 15
géneros de cactáceas con 73 especies, algunas de ellas en peligro de extinción.
En esta ocasión, hablaremos del Candelabro, el cual, tiene un tamaño impresionante.
El más grande del mundo: el Candelabro
El Pachycereus weberi, mejor conocido como candelabro, es un
cardón increíble que alcanza a medir hasta 16 metros de altura.
El nombre común es el de Cardón Espinoso y
hace referencia al parecido de las plantas con los candelabros. Estas
preciosuras se encuentran a lo largo de matorrales desérticos y bosques de
los estados de Guerrero, Puebla y Oaxaca, al suroeste de México.
El género tiene un rango nativo desde el sur de Arizona
hasta América Central, y también incluye la especie de cactus más alta,
la Pachycereus pringlei de la que se encontró un individuo de 19
metros de altura. Los candelabros alcanzan los 10 m de altura y un ancho
similar.
Características del Candelabro
Los candelabros solo producen flores blancas o amarillas.
Florecen por la noche, siendo los murciélagos los polinizadores y la
fruta comestible tiene espinas cuando la fruta madura, ya que tiene un
mecanismo para evitar comer la fruta inmadura. Las espinas se extienden
desde el tallo grueso en un patrón hermoso y las semillas de la fruta madura
pueden cosechar y moler para hacer harina.
El sitio Tehuacán-Cuicatlán se ubica en un complejo
sistema de sierras y valles que generan una gran biodiversidad y
diferentes ecosistemas. Una de las características ecológicas más excepcionales
del valle es que cuenta con una de las mayores concentraciones de cactus
columnares en el mundo.
En los bosques de cactáceas columnares más densos del
país de tetechos o viejitos, y en los últimos años se han registrado especies
que han aumentado su rango de distribución. Hoy en día, la Reserva de la
Biosfera Tehuacán-Cuicatlán es un punto de referencia para turistas,
investigadores y todo aquel interesado en conocer un espacio donde la
conservación y la generación de oportunidades para su gente han logrado convivir
armónicamente.
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